El plan alimenticio y físico de Tom Cruise para mantenerse en forma a los 62 años

  • El actor de Misión: Imposible se mantiene ágil y fuerte gracias a una rutina estricta que combina alimentación precisa, entrenamiento funcional y disciplina absoluta, aún al borde de los 63 años.

Tom Cruise no se detiene. A sus 62 años, continúa desafiando el paso del tiempo con una forma física que impresiona tanto a sus colegas como a su audiencia. Lejos de delegar las escenas más riesgosas, el actor sigue siendo el protagonista absoluto de sus acrobacias, como caminar sobre el ala de un avión en pleno vuelo para su papel de Ethan Hunt. Esto no sería posible sin una combinación de hábitos alimenticios calculados al detalle y un entrenamiento físico diseñado para potenciar su resistencia y energía.

Durante el rodaje de Misión: Imposible – Sentencia Final, Cruise reveló que inicia sus días de trabajo con un desayuno hipercalórico. Para soportar el frío, la altura y el desgaste de maniobrar sobre un biplano a más de 190 kilómetros por hora, consume un desayuno abundante compuesto por salchichas, casi una docena de huevos, tocino, pan tostado, café y abundantes líquidos. Según explicó, su cuerpo quema muchas calorías debido al esfuerzo físico y las condiciones extremas.

En esa misma secuencia, Cruise no solo está en la parte externa del avión, sino que además controla la cámara durante la toma, una prueba más del compromiso físico que mantiene con cada proyecto. El director Christopher McQuarrie confirmó que el actor está a cargo de todas sus maniobras, y el coordinador de riesgo de la película aseguró que ninguna de las tomas fue generada por computadora, todas se realizaron en vuelo real.

Una dieta estricta y sin excesos
Fuera del set, su alimentación diaria dista mucho del desayuno abundante que toma durante los rodajes. Tom Cruise sigue una dieta distribuida en 15 pequeños snacks diarios, lo que le permite mantener un flujo constante de energía sin recurrir a grandes comidas. Este plan evita los azúcares, ultraprocesados y carbohidratos en exceso, enfocándose en alimentos naturales, preparados a baja temperatura para conservar sus nutrientes y reducir la inflamación celular, lo que ayuda a retrasar el envejecimiento.

Entre los ingredientes que más consume se encuentran el salmón, avena cruda, arándanos, remolacha, espinaca, brócoli, aceite de oliva, nueces, jengibre, tomate y chocolate amargo. Además, incluye suplementos vitamínicos y minerales en su rutina. Incluso ha seguido planes de solo 1200 calorías diarias, inspirados en dietas como la de David Beckham, con el objetivo de reducir los picos de insulina, una hormona asociada con el envejecimiento celular.

Simon Pegg, su compañero de reparto en Misión: Imposible, compartió que el propio Cruise ofreció al equipo la posibilidad de comer lo mismo que él. Lejos de tratarse de comidas insípidas, el menú incluía opciones saludables y sabrosas, como dátiles rellenos con mantequilla de maní y bolitas de trufa.

Ejercicio de alto nivel y tecnología de punta
A la par de su estricta dieta, Cruise entrena cinco veces por semana. Su rutina combina ejercicios de fuerza, cardio y actividades recreativas de alto impacto como kayak, espeleología, escalada, esgrima, senderismo y carrera.

Su semana se estructura en tres días de entrenamiento con pesas y cardio, intercalados con dos días de ejercicios recreativos. También incluye ejercicios funcionales como presses con barra con un solo brazo y estocadas con peso.

El actor cuenta con equipo de entrenamiento de última generación, como máquinas que trabajan con carga excéntrica, empujando el peso hacia atrás para maximizar el esfuerzo con menos repeticiones. Este tipo de tecnología le permite mantenerse en forma sin lesionarse, y optimizar cada sesión de entrenamiento.

Con esta disciplina y enfoque, Tom Cruise no solo continúa encabezando grandes producciones, sino que lo hace con la misma energía y presencia física que lo llevaron al estrellato hace más de tres décadas.

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