Chimpancés médicos: primeros auxilios en la selva y pistas sobre el origen de la medicina
En los bosques de Budongo, Uganda, los chimpancés no solo trepan árboles y comen frutas: también están dando lecciones de primeros auxilios. Un estudio reciente observó que estos primates no solo curan sus propias heridas, sino que atienden a otros miembros de su comunidad, incluso si no son parientes. Y no, no lo hacen por un seguro médico.
Investigadores de la Universidad de Oxford, liderados por la doctora Elodie Freymann, documentaron estos comportamientos tras meses de observación directa y el análisis de registros de video de largo plazo. Las acciones de los chimpancés, dicen, podrían revelar el origen evolutivo de la medicina humana: desde el uso de plantas con propiedades curativas hasta técnicas rudimentarias de limpieza y protección de heridas.
Selva, saliva y hojas: el botiquín de nuestros parientes primates
Los científicos observaron a dos grupos de chimpancés —Sonso y Waibira— durante cuatro meses, y también se apoyaron en décadas de registros previos y testimonios de otros expertos. Documentaron 41 casos de atención médica, 34 de ellos autocuidados y 7 de atención a otros. El cuidado a terceros no mostró preferencia por sexo, edad o parentesco: ayudaban a quien lo necesitara. Al parecer, la solidaridad en la selva no depende del árbol genealógico.
Las técnicas eran tan prácticas como ingeniosas: desde lamerse las heridas o aplicar saliva con los dedos, hasta masticar hojas para luego aplicarlas directamente sobre la lesión, como si fueran cataplasmas improvisadas. Las plantas utilizadas fueron analizadas por sus propiedades químicas y, para sorpresa de nadie, muchas coincidían con las que emplea la medicina tradicional en humanos.
Los investigadores también presenciaron conductas de higiene que, francamente, merecen mención especial: limpieza de genitales con hojas tras el apareamiento y del ano después de defecar. Nada mal para una especie sin acceso a papel higiénico.
Los casos más notables de cuidado prosocial incluyeron tratar heridas, ayudar a liberar a compañeros atrapados en trampas y asistir en rutinas de limpieza. Que no todos los humanos lo hagan ya es otro tema.
Para la doctora Freymann, estos hallazgos ayudan a entender mejor las bases cognitivas y sociales de los comportamientos médicos humanos. Es decir, que antes de que aparecieran los doctores con bata blanca, ya había monos organizándose para sanar a los suyos.
Así que la próxima vez que alguien se ría de un chimpancé en un documental, recordemos que en plena jungla, sin hospital ni botiquín, ellos ya estaban aplicando tratamientos, ayudando al prójimo y, quién sabe, quizá hasta inventando la medicina con hojas y saliva.