Más mujeres en las juntas directivas: México avanza, pero el reto continúa

En 2024, la proporción de mujeres nombradas en juntas directivas de empresas que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) alcanzó el 46%, un aumento significativo frente al 33% registrado el año anterior. Así lo revela el informe “Board Monitor México 2025”, elaborado por la firma de consultoría en liderazgo y talento Heidrick & Struggles.

Este avance refleja una transformación en el panorama empresarial mexicano, donde se empieza a reconocer el valor del liderazgo femenino en los espacios de toma de decisiones. La tendencia también responde a un cambio cultural que favorece la inclusión y la equidad de género en los órganos de gobierno corporativo.

Sin embargo, aunque el crecimiento es notable, aún existen desafíos importantes. La firma subraya la necesidad de extender estos avances a más sectores y regiones del país, así como de generar condiciones estructurales que favorezcan la incorporación sostenida de mujeres en cargos directivos. En la actualidad, muchas de las decisiones que definen el rumbo económico del país aún se toman en espacios donde predominan hombres, a pesar del talento y preparación de las mujeres mexicanas.

Liderazgo con experiencia, pero menos renovación generacional

Otro de los hallazgos destacados del estudio es el incremento de consejeros con experiencia previa como CEO, cuyo porcentaje aumentó 150% en los últimos cinco años. Esta preferencia se explica por la creciente necesidad de contar con perfiles que hayan enfrentado entornos de alta presión, transformaciones profundas y decisiones estratégicas complejas.

En un contexto marcado por incertidumbre económica, cambios tecnológicos y retos geopolíticos, las juntas directivas buscan figuras con liderazgo comprobado que puedan aportar visión y estabilidad. Sin embargo, esta tendencia ha tenido un impacto en la renovación generacional: el número de directivos que ocupan por primera vez un asiento en estos consejos disminuyó del 39% en 2023 al 21% en 2024.

Esta reducción refleja una apuesta por minimizar la curva de aprendizaje, pero también plantea interrogantes sobre la inclusión de nuevas voces y perspectivas frescas. El desafío será encontrar un equilibrio entre la experiencia operativa y la necesidad de abrir espacio a nuevos liderazgos que representen los cambios sociales, tecnológicos y ambientales en curso.

El informe también revela que el 83% de los nuevos consejeros están en activo, mientras que solo el 17% corresponde a ejecutivos ya jubilados. Esta tendencia muestra que las empresas valoran cada vez más la conexión directa con el entorno empresarial actual, donde las reglas del juego cambian constantemente y donde se requiere una respuesta ágil y bien informada.

La firma consultora destaca que contar con integrantes que están al tanto de las condiciones operativas, normativas y competitivas en tiempo real permite decisiones más ajustadas a la realidad, lo que fortalece la estrategia y la gobernanza corporativa.

A pesar del progreso en género y experiencia, el informe señala que aún hay espacio para mejorar en diversidad generacional, de pensamiento y de trayectorias profesionales. Estos elementos son clave para construir juntas directivas más resilientes, innovadoras y alineadas con los desafíos que enfrenta el mundo empresarial actual.

La transformación en la composición de las juntas directivas mexicanas está en marcha, pero su consolidación dependerá de que el sector privado y los organismos reguladores continúen apostando por la pluralidad, la equidad y la apertura a nuevas ideas. México necesita liderazgos diversos que reflejen la riqueza de su gente y la complejidad de los tiempos que vivimos.