Maduro acusa a EE.UU. de preparar una ofensiva militar en el Caribe para apropiarse de los recursos de Venezuela
En medio de una creciente tensión con Washington, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció que Estados Unidos mantiene ocho buques de guerra, un submarino nuclear y más de 1,200 misiles desplegados frente a las costas venezolanas bajo el pretexto de combatir el narcotráfico.
Durante una entrevista con el expresidente de Ecuador, Rafael Correa, en el programa de RT Conversando con Correa, Maduro aseguró que el verdadero objetivo del Pentágono es controlar las riquezas estratégicas de Venezuela. “No buscan cárteles ni narcotráfico. Buscan petróleo, gas, oro, agua y nuestras tierras agrícolas”, afirmó, recordando que su país posee la mayor reserva de crudo del mundo, la cuarta de gas y una posición geográfica clave en la región.
El mandatario acusó a Washington de utilizar un “relato hollywoodense” para criminalizar a Venezuela y justificar una posible intervención militar, señalando a Puerto Rico como base de operaciones de esta estrategia. También cuestionó la legitimidad de las acusaciones sobre el supuesto “Cártel de los Soles”, sosteniendo que el verdadero epicentro del narcotráfico se encuentra en Estados Unidos, donde —según dijo— se lavan más de 500 mil millones de dólares al año en bancos legales.
Maduro advirtió que el despliegue militar estadounidense busca mantener la hegemonía de Washington frente al avance de un mundo multipolar representado por China, Rusia e India. “Lo que pretenden es un cambio de régimen en Venezuela y colonizar la región”, señaló.
En su discurso, el presidente venezolano también criticó el papel de Colombia en el negocio de la cocaína, responsabilizando a la “oligarquía narcotraficante” que —dijo— se consolidó bajo el amparo del Plan Colombia y la instalación de bases militares de EE.UU.
Frente a este escenario, Maduro llamó a la unidad nacional y al alistamiento en la Milicia Bolivariana para defender la soberanía del país, advirtiendo que Venezuela está preparada para pasar a la lucha armada en caso de agresión. Pese a sus acusaciones, el mandatario reiteró que está dispuesto a dialogar con Donald Trump siempre que no se imponga la “diplomacia de las cañoneras”.