EE.UU. refuerza su presencia militar en Oriente Medio en medio de tensión con Irán
A través de una publicación en su cuenta oficial de X, Hegseth anunció que durante el fin de semana ordenó refuerzos en el área bajo responsabilidad del Mando Central de EE.UU. “La protección de nuestras fuerzas es la máxima prioridad. Estos despliegues buscan reforzar nuestra postura defensiva en la región”, declaró.
El anuncio coincide con un reporte de Military Watch Magazine (MWM), que señala el traslado masivo de aviones cisterna KC-135 y KC-46 por parte de la Fuerza Aérea estadounidense hacia la región, como parte de un posible apoyo logístico para operaciones aéreas. El medio afirmó que para la tarde del domingo ya se contabilizaban más de 30 de estas aeronaves en el área.
MWM sugiere que estos despliegues podrían facilitar misiones de repostaje en vuelo para cazas y bombarderos, en caso de que Washington aumente su involucramiento directo en las hostilidades. Según el informe, EE.UU. ya habría movilizado sistemas antimisiles THAAD, destructores AEGIS y brindado apoyo de inteligencia y guiado satelital a las armas teledirigidas de Israel.
Mientras tanto, el ministro de Exteriores iraní, Seyyed Abbas Araghchi, acusó a Estados Unidos de ser cómplice en los ataques israelíes. “Tenemos pruebas claras del respaldo operativo de las fuerzas estadounidenses a las campañas del régimen israelí en la región”, denunció.
Desde el ataque no provocado de Israel contra Irán en la madrugada del 13 de junio, ambos países han estado intercambiando bombardeos, intensificando una crisis regional que ha sido ampliamente condenada. Rusia, China y diversos gobiernos han calificado el ataque israelí como una grave violación del derecho internacional y de la Carta de las Naciones Unidas.
El presidente ruso, Vladímir Putin, expresó su preocupación por el conflicto durante una llamada con su homólogo estadounidense, Donald Trump, advirtiendo que una escalada podría traer consecuencias impredecibles. En la ONU, el embajador ruso Vasili Nebenzia advirtió que las acciones israelíes empujan a la región hacia una potencial “catástrofe nuclear a gran escala”.
