Cierre inesperado del Louvre por protesta de empleados ante saturación turística
El museo más visitado del mundo, el Louvre de París, permaneció cerrado este lunes 16 de junio debido a una huelga espontánea de su personal. Los empleados denuncian condiciones laborales insostenibles causadas por el exceso de visitantes, falta de personal y deterioro en las instalaciones.
Problemas estructurales
El conflicto surgió cuando trabajadores de seguridad, taquillas y galerías abandonaron sus puestos durante una reunión interna. El museo recibe más de 20,000 visitantes diarios, el doble de su capacidad operativa, con concentraciones masivas en la sala de la Mona Lisa. Esta saturación ha generado espacios abarrotados, temperaturas elevadas y un evidente deterioro en la infraestructura, incluyendo filtraciones y problemas de climatización que afectan tanto al personal como a las obras de arte.
Respuestas institucionales
Frente a esta crisis, el presidente Emmanuel Macron había presentado en enero de 2025 el proyecto Nuevo Renacimiento del Louvre, un plan de 700 a 800 millones de euros que contempla mejoras a largo plazo. Sin embargo, los empleados exigen soluciones inmediatas, argumentando que no pueden esperar seis años para ver resultados.
El cierre dejó varados a miles de turistas frente a la icónica pirámide de cristal, muchos con boletos ya adquiridos. Aunque el museo mantiene su cierre habitual los martes, se espera su reapertura total para el miércoles. Este incidente refleja los desafíos globales de equilibrar el turismo masivo con la conservación cultural y las condiciones laborales dignas en los principales sitios patrimoniales del mundo.
