El debate se intensificó tras la propuesta del consejero Arturo Castillo, quien planteó entregar constancias de mayoría a los ministros electos, pero sin declarar válida la elección, alegando un cúmulo de irregularidades que, si bien no fueron comprobadas plenamente, sí generaban sospechas sobre el proceso.
La postura de Castillo fue respaldada por la consejera Dania Ravel, pero rechazada por la presidenta del INE, Guadalupe Taddei, así como por los consejeros Jorge Montaño y Uuc-kib Espadas, quienes calificaron la iniciativa como “excesiva” y “lamentable”.
“No puedo acompañar una propuesta que busca invalidar una elección por 818 casillas anuladas, cuando hablamos de más de 80 mil en total. Eso representa una desproporción que pone en duda la integridad de todo el proceso sin fundamento”, sentenció Taddei, quien defendió la labor de los funcionarios de casilla y del propio INE.
El debate se prolongó por más de tres horas y culminó entre aplausos por parte de los consejeros que respaldaron la validez del proceso. Posteriormente, se decretó un receso de 30 minutos para organizar la entrega protocolaria de constancias a los ministros electos.
La aprobación, aunque polémica, representa el primer paso oficial en la renovación del pleno de la Suprema Corte de Justicia, en un contexto de creciente tensión institucional y cuestionamientos sobre la imparcialidad del proceso electoral judicial.