Trump se mantiene necio en su postura;”Los aranceles van porque van”
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, encendió la polémica este 24 de febrero al reafirmar su intención de imponer aranceles del 25% a productos provenientes de México y Canadá, dejando claro que no dará marcha atrás pese a las protestas de sus socios comerciales.
Trump carga contra México y Canadá: “Nos han tomado el pelo”
En una conferencia desde la Casa Blanca, Trump no se guardó nada y acusó a México y Canadá de aprovecharse de Estados Unidos durante años. “Hemos sido tratados de manera injusta. No solo por ellos, sino por muchos otros países. Pero esto se acabó”, sentenció.
A pesar de que ambos países lograron una suspensión temporal de los aranceles, el mandatario estadounidense dejó claro que “los aranceles siguen en marcha y se implementarán según lo planeado”. Además, responsabilizó a sus predecesores por permitir que estas situaciones ocurrieran, asegurando que su administración no cometerá el mismo error.
El trasfondo: drogas, migración y fentanilo
Las medidas proteccionistas de Trump no solo responden a cuestiones comerciales, sino que también las ha vinculado con la crisis del fentanilo y la migración irregular. Desde su campaña electoral, ha utilizado estos temas para justificar represalias contra sus vecinos, a quienes acusa de no hacer lo suficiente para frenar el tráfico de drogas y la llegada de migrantes a territorio estadounidense.
México intenta frenar la guerra comercial, pero Trump no cede
El pasado 3 de febrero, México y Estados Unidos habían acordado suspender temporalmente los aranceles, tras una conversación entre Trump y la presidenta Claudia Sheinbaum. En respuesta, el gobierno mexicano se comprometió a reforzar la seguridad fronteriza, pero parece que esto no ha sido suficiente para el republicano.
“No queremos aranceles por solo un mes, queremos un acuerdo permanente”, declaró Sheinbaum en su momento, apostando por mantener la estabilidad en el comercio regional. Sin embargo, con Trump en la Casa Blanca, la guerra comercial parece estar lejos de terminar.
Las palabras del presidente estadounidense han generado un fuerte rechazo en sectores empresariales de ambos países, quienes advierten que esta medida podría afectar gravemente la economía de la región. A pesar de ello, Trump sigue firme en su postura: “Nosotros no perderemos más, esta vez ganamos”.
