Por primera vez, una organización judía abre una oficina en el Vaticano

El Congreso Judío Mundial (WJC) dijo que su iniciativa “Kishreinu” era una respuesta a Nostra Aetate, el histórico documento de 1965 que modernizó la relación entre la Iglesia Católica Romana, el judaísmo y otras religiones.

 

En lo que se promociona como una novedad para una organización judía, el grupo de defensa del Congreso Judío Mundial abrió una oficina en la Ciudad del Vaticano para establecer enlaces con líderes católicos y promover las relaciones entre católicos y judíos.

 

El presidente del WJC, Ronald Lauder, visitó al Papa Francisco durante la inauguración de la “oficina de representación de la organización ante la Santa Sede” el jueves.

 

La Iglesia católica y su vínculo con el judaísmo

Lauder, un multimillonario heredero de la fortuna de Estée Lauder y donante republicano desde hace mucho tiempo, presentó al Papa un documento que el WJC llamó “Kishreinu”, que significa “nuestro vínculo” en hebreo. El documento “resume el intrincado tejido histórico y cultural que une a las comunidades judía y católica de todo el mundo”, dijo el WJC en un comunicado de prensa.

 

Al recibir el documento, el Papa Francisco dijo: “Nuestras comunidades de fe entrelazadas asumen el deber sagrado de tejer un mundo imbuido de hermandad, desafiar las desigualdades, defender la justicia y garantizar que la paz trascienda los reinos etéreos para arraigarse firmemente en nuestra realidad compartida”.

 

Lauder también pidió al Papa que pida a Hamás que libere a los casi 200 rehenes tomados durante sus ataques contra Israel el 7 de octubre, algo que el Papa Francisco ya había hecho la semana pasada. Al presidente del WJC se unió Claudio Epelman, comisionado de diálogo interreligioso de la organización y jefe de su filial latinoamericana.

 

«Pedimos al Papa que use su poder, su fuerza, para liberar a estos rehenes», dijo Lauder al dirigirse al pontífice. “Puede que usted sea la única persona con autoridad moral para hacer esto. Creo que Dios, a su manera, nos ha traído hoy aquí para pedir esto en nombre de todo el pueblo judío del mundo”.

 

El WJC dijo que su iniciativa “Kishreinu” era una respuesta a Nostra Aetate, el histórico documento de 1965 que modernizó la relación entre la Iglesia Católica Romana, el judaísmo y otras religiones.

 

Fuente: jpost