Violencia contra mujeres persiste sin avances: una de cada tres ha sufrido agresiones, alerta la OMS
El organismo señala que alrededor de 840 millones de mujeres de 15 años o más han sido víctimas de violencia de pareja o violencia sexual en algún momento, lo que representa un tercio de la población femenina mundial. Solo en el último año, 316 millones de mujeres sufrieron violencia física o sexual ejercida por su pareja.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, subrayó que la violencia contra las mujeres continúa siendo una de las injusticias más extendidas y menos atendidas, y sostuvo que ninguna sociedad puede considerarse justa o segura mientras la mitad de su población viva con miedo. El pronunciamiento ocurre en vísperas del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres y las Niñas, el 25 de noviembre.
Por primera vez, el informe incorpora estimaciones nacionales y regionales sobre violencia sexual ejercida por agresores que no son pareja íntima. Según los datos recopilados entre 2000 y 2023 en 168 países, 263 millones de mujeres fueron víctimas de este tipo de violencia, aunque la OMS advierte que estas cifras siguen subregistradas debido al estigma y al temor a denunciar.
El reporte también evidencia un avance mínimo: la violencia de pareja apenas disminuyó 0.2 por ciento anual en los últimos veinte años. Para la OMS, el progreso ha sido “dolorosamente lento”.
La falta de financiamiento es otro factor crítico. En 2022, solo el 0.2 por ciento de la ayuda mundial al desarrollo se destinó a programas de prevención de violencia contra las mujeres, una cifra que ha seguido cayendo en medio de la crisis que atraviesa el sector de la cooperación internacional.
El organismo advierte que la violencia inicia a edades tempranas: solo en el último año, 12.5 millones de adolescentes de entre 15 y 19 años fueron víctimas de violencia física o sexual por parte de su pareja.
El informe detalla que la vulnerabilidad aumenta en contextos de pobreza, conflictos armados y efectos del cambio climático, que provocan desplazamientos, inseguridad económica, interrupción de servicios y debilitamiento del orden público. Estas condiciones incrementan el riesgo de agresiones.
La región más afectada es Oceanía —con excepción de Australia y Nueva Zelanda—, mientras que Europa y América del Norte registran una prevalencia del 5 por ciento. En América Latina y el Caribe, el 7 por ciento de las mujeres reportó haber sufrido violencia, según los datos de la OMS.