Quiero recuperar mi piel: por qué estas personas están eliminando sus tatuajes

El proceso de eliminar tatuajes puede ser largo, doloroso y costoso, pero cada vez más personas optan por hacerlo. Motivaciones como arrepentimiento, cambios en la identidad o simplemente querer un nuevo comienzo llevan a muchos a someterse a tratamientos láser.

Zach Gilyard, director de arte en Brooklyn, comenzó a tatuarse en la secundaria. Aunque su familia tenía tatuajes, él nunca pensó que seguiría ese camino. Sin embargo, con los años, acumuló varios diseños. Todo cambió cuando empezó una manga tradicional con una cabeza de pantera en su brazo. La inquietud que sintió no desapareció, y decidió eliminarla.

Según estudios, alrededor del 25% de las personas se arrepiente de al menos uno de sus tatuajes. La eliminación con láser, aunque más accesible que antes, sigue siendo un proceso lento. La tecnología descompone la tinta en partículas más pequeñas para que el cuerpo las elimine, pero los resultados varían según el tipo de piel, la antigüedad del tatuaje y los colores utilizados.

Decisiones del pasado

Sasha Goldbas-Nazarian, de Los Ángeles, comenzó a eliminar sus tatuajes más visibles al conocer a su esposo, proveniente de una familia judía conservadora. Aunque no era una exigencia de él, ella decidió borrar diseños hechos en su juventud que ya no representaban su identidad. Sin embargo, el proceso resultó más doloroso de lo esperado, y las sesiones se han extendido por años.

En otro caso, Z, una mujer del Reino Unido, se tatuó pecas para recuperar las que perdió por una enfermedad. El resultado no fue natural, y optó por eliminarlas. Aunque la tinta cosmética debería desvanecerse con el tiempo, no siempre ocurre, y el láser puede ser la única solución.

Un nuevo comienzo

Jayne Foo, consultora financiera en Singapur, está eliminando alrededor del 70% de sus tatuajes, incluyendo mangas completas y diseños grandes en el torso. Documenta su proceso en redes sociales, mostrando no solo las sesiones, sino también la recuperación, con ampollas y picazón intensa. Su motivación es clara: quiere recuperar su piel y empezar de nuevo.

Mientras que algunos, como Foo, comparten abiertamente su experiencia, otros, como Gilyard, lo hacen en privado. Para muchos, eliminar un tatuaje no es solo borrar tinta, sino dejar atrás una etapa de sus vidas.